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(CNN Español) – Pfizer dice que observó una disminución de la inmunidad de su vacuna contra el coronavirus. Por ello, dijo, buscará desarrollar una dosis de refuerzo y buscará la autorización de la FDA para uso de emergencia.

“Como se ve en los datos del mundo real publicados por el Ministerio de Salud de Israel, la eficacia de la vacuna en la prevención tanto de la infección como de la enfermedad sintomática ha disminuido seis meses después de la vacunación, aunque la eficacia en la prevención de enfermedades graves sigue siendo alta“, dijo Pfizer en un comunicado enviado por correo electrónico a CNN este jueves.

¿Qué significa esto en términos de inmunidad? ¿Es necesaria una dosis de refuerzo? A continuación, lo que debes saber sobre la vacuna de Pfizer/BioNTech contra el COVID-19.

¿Cómo funciona esta vacuna?

La vacuna desarrollada por Pfizer y BioNTech utiliza ARN mensajero o ARNm. Este es una hebra del código genético que las células pueden “leer” y utilizar para producir una proteína, en el caso de la vacuna contra el COVID-19, codifica un fragmento de la proteína de pico del coronavirus.

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El ARNm instruye entonces a las células para que produzcan la parte particular de la proteína de pico del virus. Así, el sistema inmunológico lo ve, lo reconoce como extraño y está preparado para atacar cuando ocurra una infección real.

La vacuna actualmente es de dos dosis.

¿Cuál es su efectividad y qué pasa con la inmunidad frente a la variante delta?

Cuando comenzó a desplegarse la vacuna de Pfizer/BioNTech, a finales del año pasado, se hablaba de una efectividad del 95% para prevenir la enfermedad sintomática del COVID-19.

Pero eso era antes de que se detectara la variante delta del coronavirus, más transmisible y calificada por la Organización Mundial de la Salud y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU. (CDC) como “variante de preocupación”.

El lunes, el gobierno de Israel dijo en un comunicado que, hasta el 6 de junio, la vacuna Pfizer brindaba un 64% de protección contra la infección a causa de la variante delta. (En mayo, cuando la cepa dominante en el país era la variante alfa, Israel encontró que la vacuna tenía una efectividad del 95,3% contra todas las infecciones).

Asimismo, esta semana, Israel agregó que la vacuna Pfizer tenía 93% de efectividad contra la enfermedad grave y las hospitalizaciones por COVID-19, frente al 97% informado en mayo en la revista The Lancet.

El mes pasado, hallazgos preliminares de un estudio en Escocia que fue publicado en The Lancet encontraron que la vacuna de Pfizer proporcionó un 79% de protección contra todas las infecciones de la variante delta, en comparación con el 92% contra la variante alfa.

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En suma, ¿qué significa todo esto? Que aunque los datos muestran que habría una mayor probabilidad de contagiarse con la variante delta, en comparación contras cepas del coronavirus, la vacuna de Pfizer/BioNTech aún tiene una efectividad de más del 90% para prevenir la enfermedad grave y la hospitalización.

¿Combinar vacunas?

Ante la preocupación por la propagación de nuevas variantes del coronavirus –y ante eventuales problemas logísticos en el despliegue local de vacunas– expertos han estado estudiando la efectividad de combinar diferentes vacunas contra el COVID-19.

A finales de junio, un informe preliminar del estudio Com-CO, que aún no ha sido revisado por pares, encontró que combinar los fármacos de Oxford/AstraZeneca y de Pfizer/BioNTech indujo respuestas inmunes fuertes contra el COVID-19.

El Dr. Matthew Snape, investigador principal del ensayo y profesor asociado de Pediatría y Vacunación de la Universidad de Oxford, dijo durante una sesión informativa del Science Media Center el 28 de junio que aquellas personas en el estudio que recibieron una dosis de la vacuna contra el COVID-19 de AstraZeneca seguida por una dosis de la vacuna de Pfizer cuatro semanas después generaron niveles más altos de respuestas de anticuerpos y células T que los que recibieron dos vacunas de AstraZeneca.

Aquellos que recibieron una vacuna de Pfizer seguida de una dosis de AstraZeneca tuvieron una respuesta de anticuerpos más baja en comparación con las dos dosis de la vacuna de Pfizer, pero respuestas de células T similares.

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Sin embargo, se necesita más investigación para ver si estos esquemas de vacunas mixtas funcionan en el mundo real. Además, los autores señalaron que el estudio tiene algunas limitaciones como el tamaño de la muestra y la edad de los participantes, todos mayores de 50 años.

Por otro lado, desde el 21 de junio, con base en una recomendación del Departamento de Inmunizaciones, las autoridades sanitarias de Chile comenzaron a ofrecer una segunda dosis de Pfizer a los hombres menores de 45 años que recibieron una primera dosis de AstraZeneca. Esto, tras anunciar la suspensión de la vacunación de este grupo poblacional pues se conoció un caso de trombosis en un hombre de 31 años.

Dosis de refuerzo

Ante los hallazgos que muestran una disminución de la inmunidad de la vacuna Pfizer frente a la variante delta, la compañía afirmó que está redoblando esfuerzos en el desarrollo de una dosis de refuerzo y que buscaría la autorización de uso de emergencia de la Administración de Medicamentos y Alimentos de EE.UU. (FDA, por sus siglas en inglés) para esta en agosto, tras publicar más datos sobre cuán bien funciona una tercera dosis.

La farmacéutica dijo que investigaciones mostraron que las dosis de refuerzo de su vacuna produjeron niveles de anticuerpos neutralizantes de 5 a 10 veces más altos que los producidos después de dos dosis.

No obstante, horas después de la declaración de Pfizer de este jueves, la FDA y los CDC dijeron que los estadounidenses aún no necesitan dosis de refuerzo.

“La FDA, los CDC y los NIH (Institutos Nacionales de Salud) participan en un proceso riguroso basado en la ciencia para considerar si podría ser necesario un refuerzo o cuándo. Este proceso tiene en cuenta los datos de laboratorio, los datos de los ensayos clínicos y la cohorte de datos, que pueden incluir datos de compañías farmacéuticas específicas, pero no se basan exclusivamente en esos datos”, agregaron.

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Estamos preparados para las dosis de refuerzo siempre y cuando la ciencia demuestre que son necesarias“, dijeron los CDC y la FDA en el comunicado.

Sin embargo, la semana pasada, a pesar de que la Organización Panamericana de la Salud (OPS) pidió al país no apresurarse con la aplicación de una tercera dosis de la vacuna contra el COVID-19, una nación ya comenzará a aplicar dosis de refuerzo: República Dominicana. 

La vicepresidenta y coordinadora del Gabinete de Salud de República Dominicana, Raquel Peña, dijo que esta tercera dosis se ofrecerá a “todas las personas que califiquen, y eso significa quien se haya aplicado la segunda dosis de AstraZeneca que tenga una cantidad de semanas, de ocho semanas y quien se haya aplicado la segunda dosis de Sinovac, a partir de esa segunda dosis entonces que haya pasado un lapso de tiempo de cuatro semanas”.

Las personas que opten por la dosis de refuerzo recibirán una vacuna diferente a la que se aplicaron inicialmente, según explicaron las autoridades dominicanas.

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