Por Andrea Moreno Espinosa
{"multiple":false,"video":{"key":"jpPSEdZY0","duration":"00:03:52","type":"video","download":""}}
VIDEO RELACIONADO – Buscan detectar el COVID-19 mediante la voz (03:52)

Creíamos haberlo escuchado todo, pero la tecnología nos vuelve a sorprender. En simple. Tomaron los aminoácidos de la proteína de la pandemia, y los convirtieron en música. Sí, lo lees bien. Una melodía.

¿Cómo? Markus Buehler, científico del MIT en Boston e ingeniero en esta materia, analizó la característica más particular del virus: sus puntas de corona. Estas en realidad son proteínas. Las que al entrelazarlas junto toda su estructura, logró asignarles una nota musical.

Lee también: Buscan detectar el COVID-19 a través de la voz con un método israelí

Estas estructuras son demasiados pequeñas para que los ojos la vean, pero pueden ser escuchadas”, afirmó el líder del proyecto.

Para José Luis Palma, Investigador de la Facultad de Ingeniería, de Universidad Central, aquí se realiza un modelamiento computacional.

Estos métodos son más bien una aproximación en condiciones ideales de cómo sería una cadena de aminoácidos de una proteína. Es por esto, que científicos proponen este nuevo método: transformar la cadena de distintos aminoácidos en notas musicales. Al escuchar la música se pueden encontrar patrones, estos están relacionados con el mecanismo de la proteína, y si se reconocen los mismos patrones en otras proteínas ya estudiadas, se podrían utilizar en contra del coronavirus”.

Hay que tener en cuenta que este no es un mecanismo nuevo, pero sí uno de los más novedosos. Denis Parra, académico del Departamento de Ciencia de la Computación en la Universidad Católica e investigador del Instituto Milenio Fundamentos de los Datos, nos cuenta sobre los ya realizados.

Anteriormente, se ha hecho sonificación de distintos datos que no son música.  Rodrigo Cadez, es profesor de la Universidad Católica, trabaja en ingeniería eléctrica como en música, y él tiene un proyecto que es de sonificación de información médica, por ejemplo, de radiografías. Él tuvo un proyecto que permitía sonificar datos médicos distintos, e incluso, ahora tiene una página de las curvas del COVID-19”.

El resultado es aún mayor, pues el destacado científico y su equipo han decidido compartir su proyecto el que está disponible en SoundCloud.  Se puede escuchar en un instrumento japonés llamado “Koto”, en una pieza que dura cerca de dos horas. El sonido, es armonioso y cautivador. Algo muy alejado de sus efectos nocivos efectos en nuestro organismo.

Es un invasor, disfrazado de visitante amistoso”.

De la música a los fármacos

Es más bien a un proceso selectivo. No al azar ni por naturaleza propia del virus. “Cuando uno escucha, se asombra, pero es porque alguien quiso que sonara así, hubo una interpretación. Alguien eligió un instrumento, y la forma en que las notas largas suenen así. En la práctica no es que suene así”. Asegura Parra.

Ellos hacen una especie de elección para tener una interpretación, porque eligen un instrumento, que le da una armonía. Entonces algunas decisiones que tomaron en función de lo que les pasa a las proteínas van en cierta medida, estirando las notas. Les suben y bajan el volumen para hacerlas dinámicas”.

Lo relevante en términos científicos es que estos experimentos podrían ayudar a descifrar el virus. “Que realmente científicos estén usando esos datos para encontrar patrones, y luego crear drogas o anticuerpos, no creo que lo estén haciendo. Tendrían que tener a cien médicos escuchando por diez años la música del coronavirus y decir: !encontré un patrón! Ya sería tarde”.

Muchos dicen que refiere a un sonido sorprendente. Otros sienten relajo. Inquietud o angustia. Quizás por la amenaza de virus en sí, o por un avance científico que nos deja perplejos, ante tal descubrimiento digno de un proyecto musical.

Tags:

Deja tu comentario


Estreno

Martes / 22:30 / CNN Chile