Toadzilla

Australia es conocida por su fauna singular, donde insectos y anfibios poseen un gran tamaño. 

Así lo demostraron los guardaparques del Parque Nacional Conway, quienes encontraron a un monstruoso sapo mientras realizaban trabajos en las vías.

Su análisis determinó que se trataba de una hembra de 2,7 kilos de peso y 25 centímetros de largo, pero no lograron identificar su edad.

Se podría tratarse del sapo más grande del mundo. Sin embargo, la vida de la bautizada Toadzilla no duró mucho, ya que fue sacrificada.

Los sapos de caña fueron introducidos a Australia en 1935 para controlar la población de escarabajos.

Estos animales pueden llegar a vivir unos 15 años y son consideradas como una de las peores especies invasoras del mundo.

Un sapo de caña de ese tamaño comerá cualquier cosa que le quepa en la boca, y eso incluye insectos, reptiles y pequeños mamíferos”, detallaron los guardabosques.

En casi cualquier época del año, esta especie es capaz de poner entre 8 mil y 30 mil huevos, propagándose con gran rapidez. Incluso, se cree que en Oceanía existen más de 200 millones de individuos.

Los sapos de caña son nativos de América del Sur y Central. Además, poseen unas glándulas venenosas capaces de secretar un “veneno lechoso”, llamado bufotoxina, responsable de causar un paro cardiaco y efectos psicodélicos.

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