Científicos han creado un nuevo altas del universo, usando un telescopio avanzado que se encuentra en el desierto de Australia. Una de las novedades es que lograron mapear un millón de nuevas galaxias, todo en menos de 300 horas.

La organización de Investigación Científica e Industrial de la Mancomunidad Británica de Naciones (CSIRO, por sus siglas en inglés), explicó que el telescopio ASKAP mapeó un total de tres millones de galaxias, con imágenes que revelan el doble del nivel de detalle de las encuestas anteriores. Las que antes habían requerido años, incluso, hasta una década en las generaciones previas de telescopios.

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Los enormes volúmenes de datos, son generados a un ritmo más rápido que todo el tráfico de internet de Australia. Ricardo Demarco, astrónomo de la Universidad de Concepción e investigador del Centro de Astrofísica y Tecnológias Afines (CATA) asegura que “es un procesamiento digital de alta velocidad a través de un supercomputador, el único en el mundo que está dedicado a procesar datos astronómicos en tiempo real”.

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El telescopio ASKAP realizó su primer estudio de todo el cielo este año, cubriendo el 83% de este y tres millones de galaxias en total. El mapa se unió utilizando solamente 903 imágenes en detalle.

Ricardo Muñoz, astrónomo de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile explica que “muchas veces los astrónomos tenemos que combinar datos tomados de múltiples fuentes, pero dificulta un poco el análisis de ellos, lo que hace más lento y en algunos casos, limita. Poder tener un mapa de tres millones de galaxias tomadas con el mismo telescopio permite hacer estudios estadísticos de manera más sencilla, con mayor confianza”.

Los astrónomos esperan que las imágenes permitan nuevos descubrimientos sobre el universo, desde la formación de estrellas hasta cómo evolucionan e interactúan las galaxias y su agujero negro supermasivo.

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Ricardo Demarco, quien además es experto en galaxias, cuenta que “esto permite estudiar varios fenómenos, entre los que se destacan las galaxias con núcleos activos. Estas emiten una gran cantidad de energía, producto de la caída de material al agujero negro supermasivo que hay dentro de estas galaxias. Su estudio nos permite profundizar en cómo se forman dichos agujeros negros. Esto es tremendamente importante, porque un gran problema en la astrofísica actual es entender cómo se forman y evolucionan las galaxias, junto a sus agujeros negros supermasivos en sus centros”.

El telescopio ASKAP es uno de los precursores de un proyecto internacional para construir el radiotelescopio más grande del mundo, el “Square Kilometer Array”, que se ubicará en Sudáfrica y Australia.

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