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Los avances tecnológicos y la increíble capacidad de adaptación que los científicos han aplicado, han permitido que durante este período de pandemia se puedan desarrollar con gran velocidad un sinnúmero de herramientas capaces de detectar el virus, desde pruebas más fáciles de detección de adenovirus hasta detectar el virus en el aire.

En conversación con Futuro 360, la Seremi de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación, Paulina Assmann, se refirió a un nuevo sistema de monitoreo y detección del virus -y sus variantes- en las aguas servidas de la macrozona del centro sur de nuestro país.

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“La evidencia científica muestra que una persona al tercer día de infectado elimina a través de las deposiciones el virus. Entonces, tienes un tiempo en que el agua residual comienza a recibir estas deposiciones con una carga viral y a la semana siguiente la persona recién presenta síntomas. Entonces, tienes una ventana en la que puedes anticiparte”, explicó Assmann.

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Pero, ¿por qué las aguas servidas y no otra cosa? Ante ello, la Seremi explicó que esto es un verdadero “torrente de información”, ya que mediante las deposiciones o la orina se limita todo, por los que al estudiarlo “puedes saber qué consumiste, la cantidad de tabaco, el consumo de alcohol por sectores. Esas son las proyecciones que tiene este sistema de vigilancia”.

En este contexto, el sistema ya fue instalado y probado con éxito en Chillán, logrando detectar 8 brotes de SARS-CoV-2 en los tres puntos donde se implementó esta herramienta. Esto significa que lo que se está produciendo allí es realizar test “PCR a más de un millón de personas semanal“, concluyó la autoridad.

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