En menos de cinco años, Sofía Galindo enfrentó dos diagnósticos. Primero leucemia linfoblástica y luego, en su año de remisión, leucemia mieloide. Su mamá, Valentina Poza, siempre estuvo a su lado, acompañándola entre Arauco, en la Región del Biobío y Santiago para ir a sus controles médicos.

Sin embargo, ella no era compatible con su hija para donarle células madre sanguíneas.

Por eso, los médicos tratantes decidieron expandir la búsqueda a registros de donantes no emparentados, como los de la Fundación DKMS. Por azar genético, es posible encontrar a personas no emparentadas que comparten características de compatibilidad.

Gracias a eso, Sofía hizo conoció a Eduardo Günther, quien posee compatibilidad con la niña, o como dicen en DKMS eran “hermanos de sangre”.

Eduardo se había registrado en 2017 y en febrero de 2018, recibió una llamada de la Fundación, en la que le indicaban que su “hermana de sangre” necesitaba su apoyo.

“Su pregunta fue ‘¿aún quieres dar vida?’ Fue un escalofrío que recorrió todo mi cuerpo lleno de emociones que nunca había sentido. Fue una sensación extraña pero se sentía bien (…). Sin pensarlo y con voz convincente le dije ‘¡sí! Por supuesto, ¿qué debo hacer?”,, contó..

En ese entonces, Eduardo vivía en el sur y tuvo que viajar a Santiago para realizar la donación. Luego del estallido social y la pandemia por COVID-19, el único encuentro que pudieron establecer fue por videollamada.

Esto fue hasta el 29 de marzo de 2023, cuando en el marco del quinto aniversario de DKMS, ambos pudieron reunirse en persona y abrazarse.

Sofía Galindo y Eduardo Günther.

“Esta experiencia ha marcado un antes y un después en mi vida y mi familia. Desde hace 5 años me considero un evangelizador en cuanto a donación de células madres se trata, pues hay mucho desconocimiento y miedo referente a ser donante y con mi experiencia he logrado que muchísimas personas tomen la decisión de registrarse y ser un potencial donante. Todos tenemos una misión en nuestra vida, ahora entendí que la mía no solo era salvar una vida sino hacer que muchos otros puedan salvar más vidas contando mi bella experiencia”, comentó Eduardo.

Hoy, DKMS hace una invitación a seguir el ejemplo de Eduardo y registrarse. Hacerlo es muy simple y no tiene costo. Los requisitos son tener entre 18 y 55 años, contar con buena salud y vivir en Chile. Quienes cumplan y quieran registrarse deben ingresar a dkms.cl y seguir los pasos indicados en la página.

De esta manera, aumentan las posibilidades de que los pacientes como Sofía tengan una segunda oportunidad de vida.

Sofía Galindo y Eduardo Günther.

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