A días de haber finalizado la 27° Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de 2022 (COP27), este 18 de noviembre inició en Punta del Este, Uruguay, la primera reunión del Comité Intergubernamental de Negociación (IINC-1) con el objetivo de elaborar un instrumento internacional jurídico que luche contra la contaminación plástica.

Denominado popularmente como un “mundial” contra el plástico, este acontecimiento es el primer paso para avanzar hacia un tratado global que reconozca y recoja la urgencia de detener la contaminación por plástico en el planeta, presente mayoritariamente en el océano.

El plástico representa una amenaza contra nuestros ecosistemas y tal como se ha estipulado en la COP27, es un problema al que ningún país por sí solo puede hacerle frente de forma aislada; es necesario producir acciones conjuntas.

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Durante esta importante reunión, Chile no se quedó atrás y la coordinadora senior de Huella Ecológica y Mercados de WWF Chile, Mariann Breu, manifestó que nuestro país “es particularmente afectado por la contaminación plástica, al tiempo que sus ciudadanos y comunidades se muestran cada vez más conscientes frente a este tipo de amenazas, lo que se ha reflejado en diversas medidas. Sin embargo, la dimensión y naturaleza de este tipo de contaminación hacen necesario un esfuerzo conjunto de todos los países y no solo acciones nacionales voluntarias”.

Se espera que durante esta semana, se llegue a un acuerdo y se desarrolle un tratado eficaz que permita:

  • Reducir la producción de plástico.
  • Imponer normativas que regulen su circularidad y mejoren la gestión de residuos, entre otros.

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Durante la charla inaugural, el presidente de Uruguay, Luis Lacalle, manifestó su preocupación sobre este tema, indicando que “hoy pertenecemos a una generación que tiene accesos a la información como nunca en la historia“, por lo que es necesario abandonar la falsa contradicción entre medio ambiente y economía.

En 1930 Uruguay era elegido como sede del primer Mundial de Fútbol. Hoy en estas salas se está jugando otro Mundial y a Uruguay le toca ser de nuevo la primera sede. Este Mundial es mucho más importante, tiene que ver con la salud y la vida y con solucionar un problema que ha crecido en el tiempo y que tenemos de manera rápida que solucionar”, dijo el ministro de Medio Ambiente de Uruguay, Andrián Peña.

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