Si nos achicáramos y entramos por la cañería contra la corriente pasaríamos por una planta de tratamiento y luego llegaríamos a un río en medio de una cuenca hidrográfica. Las cuencas son esas áreas naturales que acogen las lluvias y los deshielos que desaguan luego formando arroyos que dan vida a los ríos.
Santiago se abastece en su mayoría de la cuenca del río Maipo. Chile cuenta con 101 cuencas hidrográficas, según la Dirección General de Aguas. El tema es que, de esos 101 estanques naturales que nos proveen de agua dulce, sólo 17 se ubican entre las regiones de Valparaíso y Maule.
En dicha zona vive el 62% de la población del país, que es mucho más de la mitad. El resto de las cifras: entre las regiones de Arica-Parinacota y Coquimbo hay 41 cuencas hidrográficas para abastecer a 13% de la población. Desde Ñuble a Los Lagos, 21 estanques naturales para el 24%.
En Aysén y Magallanes son 22 para el 1% del total de los habitantes del territorio. En síntesis, donde viven más personas es en donde hay menos cuencas hidrográficas, y, precisamente, es el tramo más afecto por la peor sequía de la cual se tengan registros oficiales.
Piensa en esto cuando abras la llave, esa, por la cual aún sale agua; porque hay personas en Chile que no tienen esa suerte.
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