La sequía que enfrenta la zona central de Chile cobró en 2018 una víctima emblemática: la laguna de Aculeo en la comuna de Paine, que perdió prácticamente toda su agua.

Según una publicación de El Mercurio, las hipótesis en torno a este caso se situaban entre el cambio climático y el mal uso y sobreexplotación de los recursos hídricos, principalmente por parte de los dueños de parcelas.

Sin embargo, un análisis más exhaustivo aduce a que la falta de agua en la cuenca de “donde terminan los ríos” (traducción del mapudungun Acum-Leu) se produjo por varios factores.

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Un problema multifactorial

Un estudio publicado en MDPI journals, analiza la historia socioeconómica de la cuenca, el clima pasado y sus efectos en los niveles de agua de la laguna, las modificaciones antropogénicas en el equilibrio hídrico, las prácticas de manejo de cuencas hidrográficas y los cambios en el uso de la tierra.

Vista aérea de las casas de verano con césped y piscinas en diciembre de 2019. Las áreas circundantes están completamente secas y está claro que anteriormente se usaban para cultivos anuales

Usos de la tierra en la cuenca hidrográfica

Los usos de la tierra en la cuenca hidrográfica de Aculeo durante los años 1955, 1977, 2012 y 2019 han revelado importantes cambios  durante los últimos años.

Las áreas del lado derecho de cada fotografía representan seis puntos críticos (H1 a H6)/ MDPI.

De acuerdo a la investigación, el uso de la tierra y el balance hídrico de la cuenca han cambiado gradualmente desde la Reforma Agraria “un proceso que expropió y subdividió grandes extensiones de tierra entre 1962 y 1973, para pasar a los pequeños agricultores”. Además, los investigadores observaron un peak intenso desde principios de la década de 2010, cuando se “intensificó los cambio en el uso de la tierra que resultó en un aumento de las extracciones de aguas superficiales y subterráneas“.

La historia socioeconómica contemporánea ha estado marcada por el Inquilinaje (1860-1968) “en el que la producción agrícola se basó en la mano de obra local (…) y la Descomposición (1968-2012)”, que es el período que comienza con dicha reforma donde la expropiación de tierras, junto con la ausencia de apoyo técnico y financiero para los pequeños agricultores “resultó en que vendieran sus tierras (…) a plantaciones de frutas a gran escala y casas de verano“, se lee en el estudio.

La falta de precipitaciones

El consumo acelerado y excesivo de agua aplicado jugó un papel principal en la desaparición de la laguna, haciendo imposible que esta pequeña cuenca pudiera mantener su equilibrio hídrico natural a largo plazo.

La sequía climática persistente fue la principal responsable del agotamiento de la laguna, pero la relación entre la “precipitación anual y los niveles de agua de la laguna habría sido lineal después de 2010″ ya que hubo más de dos años húmedos documentados” con anterioridad.

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Derechos de aprovechamiento del agua

Sobre los derechos de aprovechamiento de los recursos hídricos otorgados por la Dirección General de Aguas, antes del año 2000, solo había 144 L/s de derechos de agua subterránea asignados en la cuenca del Aculeo “valor que se duplicó entre 2004 y 2008”. De hecho, a finales del período 2014-2020, se asignaron 90,9 L/s adicionales en derechos de agua en la cuenca, y alrededor del 50% de esos derechos ocurrieron después de la desaparición completa de la laguna en 2018. Actualmente, el total ronda los 381 litros por segundo, es decir, más de 12 millones de metros cúbicos por año.

La combinación de una mala gestión de los recursos hídricos y la ordenación territorial liderada por las autoridades gubernamentales colocó a Aculeo en una condición hidrológica extrema.

“Al igual que en el caso de Aculeo, muchos otros sistemas naturales de lagos y acuíferos corren un alto riesgo de desaparecer debido a una gestión inadecuada de los recursos hídricos y la planificación del uso de la tierra que, si se mejoran, podrían resultar en la sostenibilidad hidrológica a largo plazo de estos frágiles e invaluables ecosistemas lacustres“, concluye el documento.

En resumen, se puede desprender lo siguiente:

  • Desviaciones antropogénicas de afluentes que históricamente contribuyeron con significativos de agua.
  • Precipitación por debajo de lo normal (en la mayoría de los años durante la última década después de 2010), lo que aceleró el proceso de drenaje natural de la laguna.
  • Cambio en el uso de la tierra que resultó en un aumento de las extracciones de aguas superficiales y subterráneas

Revisa el estudio completo aquí

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