En un acontecimiento histórico, el gobierno de Estados Unidos ha impuesto la primera multa por basura espacial a la empresa Dish Network, entrega servicios de televisión por satélite.

La Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) sancionó a Dish con 150,000 dólares (unos $137.640.000 de pesos chilenos) por no alejar lo suficiente su satélite antiguo, el EchoStar-7, de otros satélites en órbita activa.

Este hecho pone de relieve la creciente preocupación sobre los desechos en el espacio, una problemática que amenaza a nuestra infraestructura espacial.

El EchoStar-7 de Dish, lanzado en 2002, se encontraba en órbita geoestacionaria, y la empresa estaba obligada a moverlo 299 kilómetros más lejos de la Tierra. Sin embargo, al final de su vida útil en 2022, solo lo había desplazado 122 kilómetros debido a la pérdida de combustible.

La basura espacial, que incluye satélites viejos y fragmentos de naves espaciales en desuso, representa un peligro real para los satélites activos en órbita.

La multa, aunque es pequeña en comparación con los ingresos de Dish, establece un precedente importante en la regulación de la basura espacial. Loyaan Egal, jefe de la oficina de cumplimiento de la FCC, enfatizó la importancia de hacer cumplir las normas para garantizar la seguridad en órbita.

Tenemos que tener en cuenta que entre más cosas haya en órbita, mayor será el riesgo de colisiones, lo que podría generar más desechos espaciales y desencadenar una peligrosa reacción en cadena.

Desde el lanzamiento del primer satélite en 1957, se han colocado más de 10.000 en órbita, y más de la mitad ya no están en uso.

La NASA estima que hay más de 25.000 piezas de basura espacial que miden más de 10 cm de largo.

El jefe de la NASA, Bill Nelson, ha alertado sobre el problema, destacando que incluso pequeños fragmentos podrían ser fatales en órbita debido a la velocidad orbital de 28.163 kilómetros por hora. Esto subraya la urgencia de abordar la gestión de los desechos espaciales y garantizar la seguridad de nuestra infraestructura en el espacio.

La multa a Dish Network marca un hito en la lucha contra la basura espacial, recordándonos que la responsabilidad en el espacio es crucial. Es un llamado a la acción para proteger nuestro entorno espacial y garantizar un futuro sostenible para la exploración y comunicación en el cosmos.

Más basura espacial menos observaciones astronómicas

Expertos señalan que a medida que las viejas piezas de cohetes, satélites y otros elementos que órbita el planeta, captan la luz solar, estos pueden reflejarla hacia la Tierra y otros lugares, creando un notable aumento en el brillo del cielo nocturno, lo que dificulta considerablemente el estudio del cosmos.

Si los números son correctos, esta basura espacial reflectante por sí sola es tan brillante que cruza el umbral de luminosidad oficial que los científicos consideran una vista “sin obstáculos” del cielo. 

Si bien la basura espacial causa problemas, megaconstelaciones de satélites operativos como el satélite de internet Starlink de SpaceX o los satélites 5G de AST & Science están empeorando el panorama.

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