(CNN) – Los astrónomos han utilizado el Telescopio Espacial James Webb para obtener una nueva perspectiva de un icónico favorito celestial llamado la Nebulosa del Anillo.

La nueva imagen captura detalles nunca antes vistos dentro de la colorida nebulosa, ubicada en la constelación de Lyra, a unos 2600 años luz de la Tierra.

La estructura de la Nebulosa del Anillo se puede vislumbrar a través de telescopios de aficionados y ha sido observada y estudiada durante años.

La nebulosa planetaria, que a pesar de su nombre no tiene nada que ver con los planetas, alberga los restos de una estrella moribunda mientras libera la mayor parte de su masa.

Las nebulosas planetarias suelen tener una estructura redondeada y se llamaron así porque inicialmente se parecían a los discos de los que se forman los planetas cuando el astrónomo francés Charles Messier descubrió el primero en 1764.

Vi la Nebulosa del Anillo por primera vez cuando era niño a través de un pequeño telescopio. Nunca hubiera pensado que algún día formaría parte del equipo que utilizaría el telescopio espacial más potente jamás construido para observar este objeto”, dijo el astrofísico Jan Cami, miembro principal del Proyecto de imágenes de nebulosas en anillo del JWST. Es profesor de física y astronomía en el Instituto de Exploración de la Tierra y el Espacio de la Western University en London, Ontario.

“Científicamente, estoy muy interesado en saber cómo una estrella convierte su envoltura gaseosa en esta mezcla de moléculas simples y complejas y granos de polvo, y estas nuevas observaciones nos ayudarán a descubrirlo”.

La nebulosa se creó cuando una estrella moribunda, llamada enana blanca, comenzó a arrojar sus capas exteriores al espacio, creando una estructura compleja de anillos brillantes y nubes de gas en expansión.

“El Telescopio Espacial James Webb nos ha brindado una vista extraordinaria de la Nebulosa del Anillo que nunca antes habíamos visto. Las imágenes de alta resolución no solo muestran los intrincados detalles del caparazón en expansión de la nebulosa, sino que también revelan la región interna alrededor de la enana blanca central con una claridad exquisita”, dijo Mike Barlow, profesor emérito de física y astronomía del University College London y codirector científico del JWST Ring Nebula Imaging Project, en un comunicado.

“Estamos presenciando los capítulos finales de la vida de una estrella, una vista previa del futuro distante del Sol, por así decirlo, y las observaciones de JWST han abierto una nueva ventana para comprender estos impresionantes eventos cósmicos. Podemos usar la Nebulosa del Anillo como nuestro laboratorio para estudiar cómo se forman y evolucionan las nebulosas planetarias”.

Historia de vida estelar y composición química

La radiación de la estrella interactúa con los elementos que ya han sido liberados, haciéndolos brillar. Cada elemento químico crea un color específico, lo que permite a los astrónomos estudiar la evolución de la estrella.

Y los astrónomos todavía tienen preguntas sobre los diferentes procesos que tienen lugar dentro de las nebulosas planetarias.

La estructura de este objeto es increíble, y pensar que todo esto es creado por una sola estrella moribunda”, dijo en un comunicado la astrofísica Els Peeters, miembro principal del Proyecto de imágenes de nebulosas en anillo de JWST. Es profesora de física y astronomía en el Instituto de Exploración de la Tierra y el Espacio de Western.

“Más allá del tesoro morfológico, también hay mucha información sobre la composición química del gas y el polvo en estas observaciones. Incluso encontramos grandes moléculas carbonosas en este objeto, y todavía no tenemos una idea clara de cómo llegaron allí”.

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