En 2013, un grupo de astrónomos realizó un descubrimiento impresionante. Se trata de Chariklo, un tipo de objeto espacial denominado Centauro; algo entremedio de un asteroide y un cometa, el cual cuenta con anillos similares a los de Saturno.

Ahora, a poco menos de 10 años del impresionante descubrimiento, un grupo de astrónomos logró observar este increíble objeto nuevamente. ¿La diferencia? es que lo hicieron a través del impresionante Telescopio Espacial James Webb. Con las nuevas imágenes, se corroboró que esta roca espacial cuenta con grandes cantidades de agua.

Un asteroide con anillos

Según reportó The ByteNoemí Pinilla-Alonso, científica planetaria y encargada de las observaciones, aseguró a través de un comunicado de la NASA con respecto al descubrimiento que: “Las primeras imágenes recolectadas desde la Tierra apuntaban a que el cuerpo contaba con hielo. Sin embargo, la exquisita calidad del espectro del Webb reveló señales claras de hielo cristalino por primera vez“.

Chariklo es el objeto conocido más pequeño con anillos de ese tipo en el Universo. De hecho, ni siquiera es considerado un planeta. De hecho es 51 veces más pequeño que la Tierra, según reportó la NASA. Aún así, es el Centauro más grande jamás registrado. 

Si bien, Chariklo se mueve en las partes más oscuras de la Vía Láctea, los expertos fueron capaces de analizar con lujo de detalle las características de este objeto. “Gracias a la luz reflejada por sus anillos, investigaremos su grosor, color y su composición. Esperamos conocer más sobre este pequeño objeto, y si cuenta con incluso más anillos”.

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