Crédito: NASA

(CNN) – Después de servir como un hogar para los astronautas durante los últimos 20 años, la Estación Espacial Internacional (EEI) se ha convertido en el anfitrión de habitantes bacterianos únicos y estos microbios podrían resultar útiles.

En la EEI se han encontrado cuatro cepas de bacterias, tres de las cuales eran previamente desconocidas para la ciencia, las cuales pueden usarse para ayudar a cultivar plantas durante misiones de vuelos espaciales a largo plazo en el futuro. El estudio se publicó en la revista Frontiers in Microbiology.

La estación espacial es un entorno único porque ha estado completamente aislada de la Tierra durante largos años, por lo que se han realizado una multitud de experimentos e investigaciones para estudiar qué tipo de bacterias están presentes allí.

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Durante los últimos seis años, se han descubierto en ocho puntos específicos la presencia de microbios y crecimiento bacteriano. Estas áreas incluyen módulos donde se realizan experimentos científicos, una cámara de crecimiento donde se cultivan plantas y lugares donde la tripulación se reúne para comer.

Como resultado, se han recolectado y estudiado cientos de muestras de bacterias, y miles más esperan regresar a la Tierra para su análisis. Las cuatro cepas de bacterias que aislaron los investigadores pertenecen a la familia Methylobacteriaceae.

Las especies de Methylobacterium son útiles para las plantas, promoviendo su crecimiento y combatiendo los patógenos que las afectan, entre otras cosas. Ya se conocía una de las cepas, Methylorubrum rhodesianum, pero las otras tres eran desconocidas.

A través del análisis genético, se determinó que estas estaban más relacionadas con la especie de bacteria Methylobacterium indicum. Los investigadores quieren designar a estas cepas de bacterias como una nueva especie llamada Methylobacterium ajmalii para honrar al científico de biodiversidad Muhammad Ajmal Khan, quien murió en 2019.

Las nuevas cepas pueden ser “determinantes genéticos biotecnológicamente útiles” para ayudar con el crecimiento de plantas en el espacio, dijeron los científicos. “Especialmente en lugares extremos (…) el aislamiento de nuevos microbios puede ayudar a promover el crecimiento de las plantas en condiciones estresantes es esencial”.

Sin embargo, los expertos enfatizaron que solo el tiempo y experimentos que utilizan esta bacteria mostrarán si su teoría funciona. “Dado que estas tres cepas se aislaron en diferentes períodos de tiempo y de varios lugares, su persistencia en el entorno de la EEI y su importancia ecológica en los sistemas cerrados justifican un estudio más a fondo”, escribieron los autores.

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Hasta que los humanos lleguen a Marte, la estación espacial sirve como banco de pruebas para una multitud de tecnologías y recursos necesarios para misiones a largo plazo en el espacio profundo, dijeron los investigadores. Esto incluye el estudio de microorganismos, cómo afectan la vida en la estación espacial y qué utilidades pueden tener.

Dada la cantidad de bacterias encontradas en este lejano lugar que aún esperan ser analizadas, sumado al potencial de descubrir nuevas cepas, los especialistas esperan que se pueda desarrollar un equipo de biología molecular para estudiarlas mientras aún está en la estación espacial.

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