(CNN) — Con los Juegos Olímpicos de Invierno de Beijing 2022 acercándose rápidamente, el primer tren de alta velocidad autónomo del mundo ya está en acción, transportando atletas y funcionarios entre las dos principales ciudades anfitrionas de los juegos en el histórico ferrocarril interurbano Beijing-Zhangjiakou.

El hecho de que este tren bala pueda conducirse solo es bastante notable. Pero a la mitad del viaje de 56 minutos, pasa por otra maravilla de la ingeniería: la estación de la Gran Muralla de Badaling.

La estación de la Gran Muralla de Badaling es la estación de tren de alta velocidad más profunda del mundo.

Terminada en 2019, la estación está a tiro de piedra de la entrada a Badaling, la sección más popular de la muralla centenaria. Para proteger el icónico monumento de los daños estructurales, la vía férrea y la estación que la acompaña se construyeron a gran profundidad.

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Preservando la Gran Muralla

Enterrada a 102 metros (335 pies) bajo tierra y con una superficie de más de 36.000 metros cuadrados, se dice que la estructura de tres pisos es la estación ferroviaria subterránea de alta velocidad más profunda y más grande del mundo.

La construcción de una estación tan compleja, que incluye un sistema de túneles de 12 kilómetros de largo (7,45 millas), bajo un sitio declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, no fue tarea fácil.

Según los medios estatales de China, los ingenieros utilizaron un detonador electrónico para cronometrar con precisión los explosivos hasta el milisegundo. Era la primera vez que se utilizaba la tecnología en China y permitía a los trabajadores mantener una velocidad de vibración inferior a 0,2 centímetros por segundo.

Eso significa que cada explosión se calculó con precisión para garantizar que el impacto no fuera más fuerte que un solo paso en la Gran Muralla.

Se necesitaba cuidado para garantizar que la construcción no dañara la Gran Muralla.

A partir de 2016, la construcción del túnel y la estación tardó alrededor de tres años en completarse.

El tren de alta velocidad acorta el viaje desde la capital de China hasta la Gran Muralla de Badaling de alrededor de 1,5 horas (la congestión del tráfico podría hacer que el tiempo sea mucho más largo) a alrededor de 27 minutos.

La estación se encuentra a pocos minutos de la estación del teleférico de la Gran Muralla y a unos 800 metros (0,5 millas) del punto de partida de la Gran Muralla de Badaling. También alberga la segunda escalera mecánica más larga de China, con 88 metros de largo y 42 metros de alto.

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Debido a la distancia a la plataforma del tren, la puerta de la estación se cierra para los poseedores de boletos 12 minutos antes de la salida del último tren, en lugar de los cinco minutos habituales en otras estaciones de China, para garantizar que los pasajeros tengan suficiente tiempo para hacer su camino a través de la estación masiva.

¿Aparecerá la Gran Muralla en los Juegos Olímpicos de Invierno?

Si bien no habrá ningún evento deportivo de los Juegos Olímpicos cerca de la Gran Muralla de Badaling, será parte del relevo de la antorcha, que tendrá lugar del 2 al 4 de febrero.

Como resultado, la estación, así como la sección Badaling del muro, permanecerán cerradas los días 2 y 3 de febrero.

La estación de la Gran Muralla de Badaling es parte del ferrocarril de alta velocidad Beijing-Zhangjiakou de 170 kilómetros de largo.

Badaling no es la única parte de la Gran Muralla que aparecerá en las pantallas de televisión como parte de las ceremonias de los Juegos Olímpicos de Invierno.

El distrito de Chongli y el distrito de Yanqing, dos áreas con aldeas de los Juegos Olímpicos de Invierno, también albergan partes de la antigua barricada.

Algunas pistas en el Centro Nacional de Salto de Esquí en Chongli están tan cerca como a 20 metros de la Gran Muralla, ofreciendo una vista histórica para los esquiadores que compiten en los juegos.

El tren de alta velocidad de los Juegos Olímpicos de Invierno

La vía férrea Beijing-Zhangjiakou de 170 kilómetros de largo es servida por un nuevo tren Fuxing de unidades múltiples eléctricas (EMU) de alta velocidad desarrollado y operado por el Grupo Estatal de Ferrocarriles del Estado de China.

Presentado a principios de enero, puede correr hasta 350 kilómetros (o 217 millas) por hora y reduce el tiempo de viaje entre dos de las principales ciudades anfitrionas de los Juegos Olímpicos de tres horas a 56 minutos.

Aunque el tren de alta velocidad es autónomo, un conductor de vigilancia está a bordo en todo momento. El tren puede arrancar, detenerse y ajustarse automáticamente a los diferentes límites de velocidad entre estaciones.

El nuevo tren de alta velocidad Beijing-Zhangjiakou pasa por la sección Juyongguan de la Gran Muralla el 25 de enero de 2022.

Los ocho vagones del tren están equipados con señales 5G, iluminación inteligente y 2.718 sensores para recopilar datos en tiempo real y detectar cualquier anomalía operativa.

Se diseñaron vagones especiales teniendo en cuenta las necesidades de los atletas. Por ejemplo, algunas cabañas cuentan con áreas de almacenamiento más grandes para equipos de deportes de invierno, a las que se puede acceder por medio de un código QR.

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Además de la línea ferroviaria principal, también hay dos ramales, Yanqing y Chongli, que conectan a los pasajeros autorizados con dos villas olímpicas de invierno clave.

Se ha implementado un sistema de gestión de circuito cerrado de 55 días, que comenzó el 21 de enero, para que los que se dirijan a los Juegos Olímpicos no compartan los mismos vagones de tren con otros pasajeros en la línea.

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